APUNTES HISTÓRICOS SOBRE LAS CAPITULACIONES DE ANDÚJAR EN LA BATALLA DE BAILÉN – HISTORIADOR PABLO MONDÉJAR
Mucho se ha hablado, escrito y contado, sobre la histórica «batalla de Bailén», acaecida en la jornada del 19 de julio de 1808.
Un acontecimiento en el que Andújar tuvo importancia capital ya que fue en Andújar el lugar en el que se firmaron las célebres «Capitulaciones», concretamente en el desaparecido palacio de los «Condes de Gracia Real», suponiendo este hecho el reconocimiento de la, probablemente, primera derrota del ejército napoleónico en campo abierto, durante su periplo conquistador europeo.
Hoy sería fácil hablar de Castaños, Capitán General del Ejército de Andalucía, pero quisiera hacerlo de su mano derecha, Teodoro Reding, un suizo de nacimiento, pero español de corazón, y condición, que fue quien puso la carne en el asador para la consecución de la victoria final en este episodio, encuadrado en la denominada «Guerra de la Independencia».
Nacido en Schwyz, (Suiza), el 3 de julio de 1755, ascendió en vida al cargo de Teniente General del Ejército español, y Capitán General del Principado de Cataluña.
«Primogénito del capitán Theodor Antón Reding, barón Reding von Biberegg, y de Magdalena Freuller.
En el seno de su familia, de profundas raíces católicas y de larga tradición militar, recibe una esmerada educación en la que se le inculca la práctica de las virtudes tanto religiosas, como castrenses; y también el amor a su Patria, y a su Cantón, del que su familia se sentía responsable.
A los catorce años, después de morir su madre, viajó a España para iniciarse en la carrera de las armas, en el Regimiento de Infantería de su mismo nombre, uno de los que su familia mantenía al servicio del Rey.
Desde esa fecha hasta su muerte, únicamente se tomó dos permisos semestrales en los que regresó a Suiza, permaneciendo el resto de su tiempo prestando sus servicios en su regimiento.
Se puede, pues, afirmar, que siempre vivió en España, y que su biografía es su Hoja de Servicios».
(Cervelló Buranés, Ignacio. https://dbe.rah.es/biog…/11036/theodor-reding-von-biberegg).
En referencia a la batalla de Bailén, debemos indicar que Dupont, General francés que a la postre sería derrotado, se había establecido en Andújar, tras saquear Córdoba anteriormente.
Una vez entendida la gravedad de la situación, habiéndose unido en un solo ejército las tropas españolas de las capitanías de Granada y Sevilla, comandadas por Reding y Castaños respectivamente, Cervelló Buranés nos comenta:
«Los mandos españoles se reunieron en Porcuna en los primeros días de julio, y decidieron la maniobra para atacar a Dupont, que en resumen consistía en fijar la posición de Andújar por el frente, mientras la División de Reding, desde Mengíbar, penetraba hasta Bailén, para caer sobre Andújar en la retaguardia francesa. (…).
Enterado Dupont de la ocupación de Bailén por las fuerzas españolas, comprendió la peligrosa situación en que le ponía la maniobra española que lo dejaría entre dos fuegos. Su reacción fue inmediata y esa misma noche levantó el campo sigilosamente y se dirigió hacia Bailén con la intención de abrirse paso y reunirse con el resto de sus fuerzas que se encontraban en las proximidades de Despeñaperros.
Sobre las 02.30 del día 19 de julio de 1808 la vanguardia de la columna francesa tuvo un combate de encuentro con la vanguardia española que se había adelantado unos kilómetros mientras estaban organizando la columna para marchar sobre Andújar. Los mandos españoles pronto comprendieron que se enfrentaban a todas las fuerzas que Dupont tenía en Andújar». (Cervelló Buranés, op.cit).
A las doce del mediodía, de la jornada del 19 de julio de 1808, Dupont desistió de su empeño al comprobar la firmeza de las tropas españolas, bien pertrechadas y asistidas por la población colindante.
El calor del estío, la falta de agua, y la táctica empleada por los mandos españoles hicieron mella en las tropas galas; alrededor de dieciocho mil soldados franceses entregarían las armas, firmándose una primera capitulación en la «Casa de Postas», término de Villanueva de la Reina; para, finalmente, tal y como he indicado con anterioridad, rubricar ese primer legajo con unas «Capitulaciones formales», hecho que tuvo lugar en Andújar el 22 de julio de 1808.
Teodoro Reding
Teodoro Reding, que meses más tarde sería nombrado «Capitán General del Principado de Cataluña», fallecería el 23 de abril de 1809, (penúltimo domingo de mes, víspera de la Romería de la Virgen de la Cabeza), víctima de las heridas que le causó la orda francesa en la derrota hispana de Valls, acontecida en la jornada del 15 de abril de ese año, en las inmediaciones de Tarragona.
Precisamente, en 1809 sabemos que la Fiesta Mayor de Andújar se celebró con relativa normalidad, aunque la misma no estuvo exenta de polémica entre los regidores municipales.
Así, don Carlos de Torres Laguna nos dice:
«17.4, lunes. D. Rafael de Valenzuela y el marqués del Cerro, que son alférez mayor y alcaide del castillo de esta ciudad respectivamente, dicen que no subirán a la fiesta de la Virgen de la Cabeza del presente año, porque tanto el Corregidor como el ayuntamiento no les han guardado las preeminencias que el Rey les tiene concedidas. Los inculpados dicen a su vez que no les han faltado en nada, y que se les ha mandado las palmas y la cera. Se nombran otros dos comisarios para tal fin». (Torres Laguna, 1981: pág 421).
Como el lector puede comprobar, independientemente del curso de la guerra, no muy favorable a los intereses de España, que veía como el invasor napoleónico se asentaba en nuestro territorio, los regidores iban a lo suyo; básicamente seguían inmersos en otra guerra, en este caso más personal, en donde el ego y el estatus social prevalecían, inclusive, sobre los del común.
Un siglo después de este singular suceso, el 22 de julio de 1908, y meses antes de los fastos de la Coronación Canónica de la Virgen de la Cabeza, (hecho que, curiosamente, tendría lugar en la jornada del 23 de abril de 1909, I Centenario del fallecimiento de Teodoro Reding); así como de la conmemoración de la concesión pontificia de su patronazgo sobre la Ciudad de Andújar; el Excmo ayuntamiento mandó labrar una lápida alegórica de esta efeméride militar, cuyo texto dice:
«A los heroicos y triunfadores/ guerreros de Bailén/el pueblo iliturgitano/en el Centenario de la gloriosa/ CAPITULACIÓN DE ANDÚJAR/ 22 de julio de 1908».
Fotografías: Teodoro Reding, fuente: Web «Real Academia de la Historia»; fachada principal del ayuntamiento de Andújar, en su margen inferior izquierdo se observa la lápida con la inscripción de las capitulaciones; lápida conmemorativa del Centenario de las «Capitulaciones de Andújar», inserta en la fachada principal del Consistorio.
Bibliografía:
- Cervelló Buranés, Ignacio. «Biografía de Teodoro Reding». Real Academia de Historia. Enlace web: https://dbe.rah.es/biog…/11036/theodor-reding-von-biberegg
- Torres Laguna, Carlos de. Andújar a través de sus Actas Capitulares. Instituto de Estudios Giennenses. Diputación Provincial de Jaén. Jaén, 1981.