Monumentos en Andújar
Prepárate para sumergirte en la rica historia y cultura de esta joya andaluza mientras te proporcionamos las claves para descubrir cada rincón de esta ciudad.
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Iglesia Santa María
Dejando una huella indeleble en el paisaje del mañana.
MUJER EN JAMUGA
El Monumento a la Mujer en Jamuga, ubicado en Andújar, es una obra que rinde homenaje a una figura tradicional de la cultura local: la mujer que utilizaba la jamuga, un tipo de silla de montar adaptada para damas. Este monumento, con su delicada escultura, captura la esencia y la dignidad de las mujeres andujareñas que, durante siglos, utilizaron la jamuga como medio de transporte.
La pieza no solo celebra la tradición, sino que también destaca el papel fundamental de la mujer en la historia y el patrimonio cultural de Andújar.
Ayuntamiento de Andújar
La Historia Resucitada: El Ayuntamiento de Andújar a Través de los Siglos
Fuente barroca
Situada en la Plaza de España, junto a los jardines de la iglesia de Santa María.
La magnífica Fuente Barroca, un tesoro de Andújar, vio la luz en 1739 gracias al arte del cantero Francisco Ortega, bajo la maestría del renombrado arquitecto José Gallego, quien dejó su huella en las obras de la Catedral de Jaén. Esta majestuosa fuente, una joya histórica, también es reverenciada simplemente como ‘La Fuente Barroca’.
Hornacina Virgen de la Consolación
LUGARES CON ENCANTO, C. ALTOZANO DE LA VIRGEN MARÍA
Descubre la Hornacina de la Virgen de la Consolación, un tesoro de Andújar que recupera la antigua devoción que florecía en la histórica Puerta del Sol de la Muralla de Andújar. Esta hermosa obra es fruto del talento de la artista local doña Ascensión Bracero Almagro, una ceramista y alfarera de renombre, obra situada en el altozano de la Virgen María.
La hornacina, adornada con azulejos cerámicos, alberga una conmovedora imagen de la Virgen de la Consolación. Durante tiempos pasados, cuando los viajeros partían de Andújar a través de la Puerta del Sol en dirección a Castilla, solían encomendarse a la Virgen, solicitándole protección y guía en su peligroso recorrido por el Camino de la Corte. Esto llevó a que el altozano donde se encuentra esta hornacina se conociera en honor a la Virgen, convirtiéndose en un punto de referencia y devoción para generaciones de viajeros.